miércoles, 9 de noviembre de 2011

¿DEMOCRACIA? ¿QUÉ DEMOCRACIAS? (V)

Hicieron todo lo posible para que las jóvenes generaciones que no habían conocido la represión de la dictadura, se mantuvieran al margen de los intereses ciudadanos, principalmente de los que determinan la cosa pública. Y se cuidaron muy mucho de poner un tupido velo a lo que había sido aquélla, sus represiones sus crímenes y sus calamidades, para que existiera en los ciudadanos, en particular entre los más jóvenes, una amnesia total y desconocimiento de su reciente pasado. Ignorar nuestras Historia era el mejor modo de alienar a los ciudadanos, lo que les permitía a los manipuladores culminar sus planes, aunque fuera destruyendo la memoria y el futuro de la gente, que tarde o temprano se vería obligada a hacerse muchas preguntas, a todas las respuestas que les habían negado.

Pero para que todo les saliera a su gusto, al gusto de los que mandan y sus asalariados, era necesario hacer todo un entramado de leyes que les permitiera que perdurara en el tiempo la mentira fraguada en la transición modélica, como se encargaba de difundir toda la reacción mundial, hasta que mucha gente se lo creyera, "una mentira o medio verdad repetida mil veces se convierte en verdad, y hasta en dogma"; y hasta que fuera puesto como modelo, hasta que todos o al menos la mayoría, comulgara con esa rueda de molino. Era necesario colocar las trampas de una ley electoral antidemocrática que hiciera que la mentira pareciera realidad. E incluso a través de los años la han ido empeorando, limando aquellas posibles pequeñas fisuras por las que podrían colarse los no deseados, los que podrían turbar sus sueños; los que pudieran tirar la piedra a su charco de aguas plácidas, y que al removerlas pudiera salir a la superficie la pestilente realidad de un régimen corrupto, exclusivo de unos cuantos, contra la inmensa mayoría. 


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