sábado, 23 de abril de 2011

FRANCIA: LOS TOROS PATRIMONIO. ESPAÑA, CON LA CORRUPCIÓN NOS APAÑAMOS





¡Qué vergüenza de políticos que tenemos en España! Y los catalanes aún los tenemos peor, si es que eso es posible. Resulta que un país, Francia, hace cien años estableció la separación de la Iglesia y el Estado, dando un impulso a la modernidad. España seguía–y sigue– supeditada a una Iglesia Medieval, defensora de castas y desigualdades,  rezando como solución de los problemas. En el país galo parte de la derecha, combatió el fascismo junto con la izquierda en la Resistencia. En España el fascismo era la Iglesia y la derecha, mayoritariamente era fascista y seguía mirando a siglos pasados, reza que reza con unos militares mediocres, parásitos de castas y golpistas. En Francia, que hizo la mayor Revolución que inició los Derechos del Hombre, tiene un nivel democrático, con todas sus deficiencias que acarrea el sistema capitalista, que ya quisiéramos nosotros rozar, que seguimos supeditados en tantas cosas al golpista de El Pardo que sigue marcando la pauta, dígase lo que se diga. En Francia se llevó ante los tribunales a los asesinos fascistas; en España juzgan  al único juez que ha querido hacer justicia con los asesinados por la dictadura;  además de aceptar que  Gürter se salgan con la suya encausando al juez, para la sorpresa del mundo, con lo que los ladrones aparecen ante el ciudadano con  más derechos que ellos; se   crean un desbarajuste y dejan en libertad a un multiasesino, que al rectificar se les escapa, pudiendo muy bien engrosar las filas y la dirección de la banda. Francia cuida su patrimonio cultural, y nos arrebata la primacía de los toros, convirtiendo la Fiesta española en Patrimonio Nacional de Francia. Mientras, en España,  aunque sólo fuera por interés turístico y por los miles de aficionados que haya, debiera haberse potenciado o amenos dejarlo,  nuestros mediocres vividores políticos, quieren dar lecciones de no se sabe qué, y los prohiben. De lo único que pueden dar lecciones nuestros políticos, visto el panorama,  es en corrupción, que ya puestos, y por el camino que vamos, no nos extrañaría que la convirtieran en Patrimonio, como Fiesta Nacional, ante la falta de otra cosa. Que unos  señoritos bien pagados con nuestro dinero,  los  del caso Pretoria, Banca Catalana y el devalijamiento del Palau, nos quieran dar lecciones de "humanismo" y prohiban los toros, demuestra la casta de mediocres que viven del presupuesto, y deciden qué  podemos ver y qué no. Mientras mantienen carísimas cadenas de televisión, de mediocres e idiotizantes programas,  para su lucimiento. ¡Menuda casta! ¡TODOS A LA CALLE, MUCHOS A LA CÁRCEL!
U. PLAZA