viernes, 22 de mayo de 2015

LOS DINOSAURIOS AL ESCAPARATE


Que el PP y el sucedáneo de PSOE hayan llegado a la conclusión de que tienen que sacar del museo a los fósiles de la política   dice mucho de lo nerviosos que están ellos y la Mekel porque sus candidatos ya no puedan ofrecerle todo lo que ella y la Troica les exijan, sin la menor oposición, ellos que se llaman patriotas.

Como el saqueo de  la Sanidad y la Enseñanza públicas, al tiempo que los gansters financieros cada día acumulan más riquezas. Lo de Gonzáles es patético porque ya lleva tiempo en el empeño de la Gran Coalición con sus colegas del PP.  Lo del tío de las Azores, es chungo. Si lo que opinan ambos defensores de las oligarquías es el futuro que le ofrecen a los españoles, sin duda hace falta limpiar los establos de Ugias, y un esfuerzo hercúleo para lograrlo, tras tantos años de coto cerrado. 

Que el "cruzado" del Séptimo de Caballería que lucha contra los indios venezolanos que tanto molestan al emperador; y el que ponía las patas sobre la mesa con el amo Bush contemplándolo satisfecho por lo hecho en Irak, sean la  esperanza de futuro que ofrecen los dos partidos oligárquicos de la monarquía –con los aprendices de CDC-ERC si son necesarios–,  los que se han venido repartiendo el pastel desde hace 35 años; si los que se entregaron en los brazos de la terrorífica Merkel y la Troica, es lo que nos ofrecen, a los españoles como regeneración de lo que ellos han degenerado, es que ya no les queda nada que perder y se lanzan al vacío a la desesperada para defender el régimen que tan bien les fue a ellos y que nos ha llevado a esta situación de descomposición, por la corrupción en las instituciones, que debieran ser garantía de democracia.

Y si Sánchez cree que resucitando a González va a mejorar su imagen, que se vuelva a la universidad privada de la que procede, o que, como ha hecho hasta hace poco, que vuelva a ser mudo como lo fue cuando, siendo diputado, Zapatero se cargó el Artículo 135 de la Constitución para favorecer al gangsterismo financiero contra los servicios públicos. No debió enterarse el hoy flamante secretario general del PSOE de aquel atropello de su entonces jefe contra la democracia, hecho de consuno con el otro partido de la oligarquía, poniéndole, a partir de ese momento, las alfombras al PP, para que llevaran a cabo, sin cortapisas, todas las atrocidades que han querido contra los ciudadanos y las libertades democráticas. 

Ahora, en las próximas elecciones, los ciudadanos tienen la oportunidad de empezar a cambiar las cosas y culminarlas en las elecciones de otoño. Y deben meditar el significado de su voto; porque el voto puede ser la forma de cambiar para bien; o un arma de doble filo que nos siga cortando la yugular de los derechos sociales, si se vuelve a confiar en los mismos de siempre que han patrimonizado los cargos, y algo más. Y sacan al sol y al escaparate a sus viejas glorias para ver si de esa forma logran que un sector de la ciudadanía les crea. 



Ubaldo Plaza