lunes, 26 de agosto de 2013

EL SUEÑO DEL INCONSCIENTE

  Josep Rull, eterno alcaldable de la derecha, hoy ultra, de Tarrasa, que provine de la Juventudes  convergentes –que mientras sus mayores presentaban la cara amable de burgueses que hasta parecían  civilizados, antes del saqueo sanitario–, ellos con sus colegas de ERC la armanban de vez en cuando con actitudes que mejor quisiéramos haber olvidado, de nuestro pasado reciente; pero que la derecha hoy  resucita, tanto la del PP como la de sus colegas convergentes.  Porque, que nadie se engañe, defienden los mismos intereses de clase, unos en toda España, otros en Cataluña. De hecho siempre se han apoyado.
  Pues este  hombre, que vive de sus propios  sueños  y fábulas que los sacerdotes de sus religión le han inoculado, no se da cuenta de las incoherencia que dice, que sólo sirven para alegrarle los oídos a los fieles que adoran al muñeco. 
   Afirma que con una participación del 50 %  en su referéndum patriotero ya habría suficiente para poner en marcha los delirios independentistas de la derecha catalana, a la que sumisos compañeros de viaje le aguantan el cirio en el desfile de máscaras. Suponemos que será para que se tapen las desastrosas políticas de su jefe, que desgobierna y agita Cataluña en lugar de gobernar, por delegación de Junqueras, que acabarán devorándolos, sin que se den cuenta.

  ¡Hombre Rull. La derecha siempre ha sido salvaje, intolerante  reaccionaria, negociante y dispuesta a sacar provecho para engrosar sus cuentas corrientes sin mesura, sin medir –o midiendo muy bien– las consecuencias ajenas, para sus víctimas. Pregúntaselo a las que sufren los recortes sanitarios, mientras os gastáis un munt de diners, habiendo miles de niños desnutridos, diga lo que diga el inefable Ruiz–, en la promoción patriotera. A la derecha a la que perteneces le ha importado todo un bledo si sacaba provecho, pero no es idiota. No la hagas quedar mal. Sabes perfectamente, y si no lo sabes, peor que peor, que las cosas no son así, aunque te lo hayan explicado en clases de domesticación o adoctrinamiento particulares!

  Hasta hace un tiempo se consideraba  que necesitabas un hervor como líder de la derecha de Tarrasa;  ahora, después de los ejercicios espirituales a los que vienes asistiendo de la manos del Mesías  que nos quiere llevar, no a la Tierra Prometida, sino a la Sicilia de final de siglo XIX, creo que necesitas que la olla hierva una buena temporada. Hay que ser muy inconsciente o un alma cándida, para creerse lo que le dicen, o uno se fabrica en sus noches de delirios. 

Ubaldo Plaza