miércoles, 7 de agosto de 2013

LA LISTA ÚNICA DEL PUC




Uno de los capitostes de la derecha privatizadora catalana ha propuesto a sus colegas de la cosa identitaria, que como se sabe son casi todos los partidos del régimen, hacer una candidatura única de cara a las elecciones al parlamento europeo.  Lo que esté pájaro de la derecha más reaccionaria pide es que el PUC, (Partit Únic Català que existe de facto, algo así como un Movimiento Nacional con barretina), se presente a las elecciones dejando atrás la ficción de que hay varios partidos de la burguesía talibana, aunque alguno se llama de izquierdas. 
   

   Pues estaría bien para que a muchos ciudadanos que aún no se han enterado de quiénes les recorta la vida, se les quitara la venda de los ojos. En Cataluña es una ficción eso del sistema de partidos distintos, y parlamentario. Todos hacen teatro, y luego se juntan para reírse de nosotros entre recorte y recorte,  corrupción tras corrupción, pero que todo queda entre colegas, puestas en escena a parte.

   No creemos que lo hagan porque se desmantelaría el edificio elaborado con tanto mimo con la arquitectura mejor estructurada de la casta política del negocio y la privatización catalana: hacernos creer que son diferentes, cuando sus objetivos no difieren: "todo por la patria...amb barretina, eixó sense dubtes". 

  Así que seguirán como si fueran cosas distintas, mientras lo beneficios del Régimen sean compartidos, de forma proporcional, naturalmente. Porque aquí la gran derecha, la de siempre, y cuando decimos siempre, es siempre, también antes de esto a lo que llaman democracia, se lleva la parte del león. 

  Aquí a nadie le interesa tirar de la manta, se abrigan todos con ella. Y cuando en el teatro parlamentario alguno alza la voz, es sólo eso, una puesta en escena. Después, todos tan amigos. Es de suponer que la propuesta del rehén de ERC, de CiU, ha sido una figura retórica, o un  lapsus linguae ante la realidad del sistema que sin duda conoce muy bien, y los objetivos de los receptores del mensaje. Pero pronto le habrán dicho: "quita, quita, que se nos verá el plumero aún más, sigamos como estamos que se nota menos". O sea, que nada. La unidad patriotera se hará como siempre: sin que lo parezca.

Ubaldo Plaza

viernes, 2 de agosto de 2013

BOCHORNOSOS ESPECTÁCULOS


Los bochornosos espectáculos a los que hemos asistido los españoles con un par de días de diferencia, primero en el cacicato de Artur Mas y después en el feudo de Mariano Rajoy, debieran entrar en los tratados de psiquiatría. 

 ¡Y que haya ingenuos –o caraduras– que a esto lo llamen sin inmutarse democracia! Cuando ningún político, cuando llega el momento en que son pillados con el bote de mermelada abierto y vacío –las arcas públicas–, el hocico impregnado de ella, tenga la suficiente entereza moral y ética para irse a casa, es un diagnóstico claro de la enfermedad que padecemos de falta de democracia y de los mínimos principios morales. 
   Estos días ha pasado por dos veces en España. Una en el Parlamento de Rajoy;  la otra en el parlament de Artur Mas. Como todo el mundo sabe, un político puede robar  y mostrarse, mientras no se sepa "digno"... hasta que lo pillan, o se pone en entredicho su comportamiento.  Pero aquí son pillados y no cambian ni el rictus. Lo niegan y basta. Y a aguantar para ver si escampa.
  Y no hay mecanismos democráticos EFICACES para desengancharlos del sillón, para nuestra vergüenza. Y lo peor es, como vimos en el Parlament catalán y el Parlamento español, que tampoco la ética alcanza a sus correligionarios del partido que apoya al gobierno. Los mismos que se engolfan y apoyan contra viento y marea al que saben, que como mínimo, ha hecho algo que no es correcto, y que lo invalidada para el cargo. 
   En el caso Catalán aún es peor porque ERC apoya al partido que según el juez se ha beneficiado de actos de corrupción. Al menos en el español todos los partidos han reprochado al PP su silencio y la huida del presidente para no dar explicaciones. Aunque es muy aleccionador que CiU, con Duran a la cabeza  en la capital de la República, no pidiera la dimisión de Rajoy ¿Por qué será?
   Esto cada vez está más podrido. Y hay que cambiarlo todo. Y ya que no es la ética lo que prevalece en el comportamiento de los gobernantes, ni tampoco  de la de sus coros pretorianos correligionarios, hay que legislarlo con suficiente claridad para que al mínimo mal comportamiento puedan ser excluidos del cargo. 
  En "cualquier país de nuestro entorno", como gustan decir a los caciques de esta tierra, cuando se trata de aplicar las órdenes que llegan de esos países, represión para hacerlas efectivas incluidas, habrían dimitido hace mucho tiempo.Tanto Mas como Rajoy. Y aunque también tengan mecanismos legales para resistir, no lo hacen porque los primeros que le vuelven la espalda son sus compañeros de partido que dan por amortizado al sujeto, considerado como un lastre a partir de que se conocen sus "hazañas". 
  Aquí se convierten en un poderoso clan de intereses, prietas las filas, se numantizan en defensa de sus cargos muy bien remunerados, prebendas incluidas, o ensobrados. Seguramente porque  están en situación delicada. Si no ¿cómo es que ningún diputado o cargo importante de los partidos que gobiernan se sonroja ante los escándalos, y dimite sin más y demuestra no ser cómplice con el presunto corrupto?

Ubaldo Plaza



martes, 30 de julio de 2013

LA ADVERTENCIA DE LOS MOSSOS D´ESQUADRA A LOS ANCIANOS


El diario local de Tarrasa, publicó el otro día una muy relevante advertencia. Decía así: “Los Mossos d´Esquadra aconsejan a las personas mayores extremar la precaución a la salida de los bancos”.

  Es relevante la advertencia de la policía a los ancianos. Importante sin duda. Pero incompleta. Muy incompleta. Porque al peligro que supones descuidarse a la salida de los bancos, ocasión que pueden aprovechar los descuideros desalmados, hay que sumar un mayor peligro todavía: el que puede acarrearle a los ancianos, la entrada y la permanencia durante cierto tiempo de descuido en los bancos, sin duda mucho más peligrosa. Los que hayan sido estafados con las preferentes lo saben de buen grado y de primera mano. Además, los desgraciados descuideros de la salida, si son pillados, irán a prisión. Los  aprovechados de la entrada y permanencia, se irán de rositas y hasta contarán con ayudas protectoras añadidas, como estamos viendo. Sea con el apoyo de la Fiscalía, sea por el indulto de un presidente amigo.

  Los descuideros de de la salida, si no provocan daños físicos a sus víctimas, son mucho menos peligrosos que los que  inducen, a los ancianos, o no ancianos, a aceptar lo que no conocen ni están en condiciones de conocer. Y lo hagan aprovechándose de la confianza que el anciano cliente tiene en el empleado de toda la vida. Y sin duda inducido a que estafe, por los que lo hacen desde las mullidas moquetas, sueldos y primas de escándalo. 

  Ya se sabe que por muchos robos de bancos que haya, los principales se suelen hacer desde dentro y por la decisión de los banqueros. Y hasta legalmente. Que ni así les satisface y lo hacen también de forma truculenta. Y con la colaboración de los que debieran proteger el dinero público. Por eso creemos que los Mossos d´Esquadra han hecho una buena advertencia, pero insuficiente, incompleta. Pero claro, eso no es políticamente correcto. El poder es el poder. Hoy, como siempre, los únicos bancos fiables, por desvencijados que estén, son los del mobiliario público. 

Ubaldo Plaza

viernes, 26 de julio de 2013

EL DESEMBARCO DEL PSOE EN CATALUÑA, ÚNICA ALTERNATIVA AL PSC


   Sigue el baile de máscaras o de disimulo entre el PSC de Pere Navarro y el PSOE de Rubalcaba, sin que nada quede claro salvo que cuando termina la discusión, ambos manifiestan  su"indestructible voluntad, o poco menos, de unidad". Pero no es creíble, porque todo sigue en el mismos sitio, porque no hay solución. Ambos dirigentes siguen atrapados en sus propias contradicciones, fruto de la situación que cada uno de ellos tiene en su seno.
   Navarro, al que en principio no hay por qué negarle la voluntad de solucionar el problema, sigue prisionero de sus propios demonios nacionalistas, que lo atormentan, por más que quiera disimularlo. Y no ha sido capaz, por esos mismos tormentos psicológicos, de tomar cartas en el asunto y despejar la pesadilla que provoca tener que convivir con los contrincantes nacionalistas de su partido, que lo asfixia, y si persisten lo liquidarán, para mayor gloria de la derecha convergente, hoy más ultra que nunca. 
  No se comprende, bajo la luz del farol socialista, o simplemente  de sentido común tanta condescendencia, cuando no paciencia con los que quieren que el PSC sea una copia de CDC. Pero sí se entiende si se mira bajo el prisma nacionalista de la derecha. Y es ahí donde queda Navarro inmovilizado, tratando de contentar a aqueos y troyanos. El resultado es que la formación que encabeza sigue paralizada, entendiendo como tal, para los intereses populares, no para la burguesía, que se frota las manos.    
   Y Cuando Navarro se entrevista con Rubalcaba, se tiene la impresión de que en lugar de ser él, el que encabeza el sector mayoritario, es decir, el socialista, para entendernos, lo hace en nombre de sus adversarios nacionalistas del partido, poniendo encima de la mesa de negociaciones cuestiones que sabe no pueden ser aceptadas por un partido socialista, por descafeinado que éste esté, por disparatado, aceptando postulados de la derecha nacionalista, que  ha llevado al PSC al lugar en que se encuentra.
  Y Rubalcaba, carente de autoridad para tomar decisiones –y posiblemente por falta de voluntad política por desconocimiento de la verdadera faz reaccionaria del nacionalismo–, porque los socialistas de toda España parecen estar escarmentados del "victimismo" de sus, al menos por ahora, compañeros del PSC. "Victimismo" que tantos réditos ha reportado a la derecha catalana –no a los ciudadanos catalanes–, por la falta de decisión de todos los gobiernos de España, ante todo tipo de chantaje. Y esos “compañeros socialistas”, parece que han llegado a la lógica conclusión, que intentar calmar a la fiera nacionalista, por muy "compañeros" que se digan, dándole carnaza, al final acaba tragándose o escupiéndoles a la cara. Y han decidido plantarse. Y siguen embarrancados.
   Porque la solución, como ya hemos apuntado aquí en alguna ocasión, no pasa por negociar nada con nadie al respecto, para que PSOE sea el partido socialista en toda España. Y "la solución federalista" así, sin más, improvisada, carece de sentido, y no es creíble. Y lo que deben hacer,  pensamos, es que el PSOE debe decirle por cortesía a Navarro que se van a instalar en Cataluña como partido. Y que invitan a los socialistas catalanes, tanto a los del PSC como a los que no lo son –que a estas alturas son mayoría, sobre todo votantes que los abandonaron, precisamente por su persistencia en copiar a la derecha convergente– para que se integren en el partido, si lo desean. Nada más.
   Estamos seguros que esto tendría una rápida respuesta de esa masa de socialistas que andan desorientados, desperdigados y  con deseo de “desmontillarse”, en asociaciones, plataformas y todo tipo de intentos de “crear algo útil en favor del socialismo”, que los libere de las pesadas cargas de los nacionalistas que  ha inmovilizado hasta ahora al PSC. 
   Esto tendría la inmediata clarificación de la posturas, toda vez que los actuales dirigentes del PSC tendrían que pronunciarse, tomar partido, o arriesgarse a desaparecer con mayor celeridad que ahora. 
  Y sería beneficioso por varias razones: Los socialistas o socialdemócratas, tendrían un punto de referencia, alejado de ese batiburrillo de la indefinición, en que, dependiendo con quién se hable, “es más nacionalista que socialista”. O simplemente nacionalista. Pero que unos y otros tiran para su bando. Y los que son socialistas se ven  en la necesidad, a su pesar, de defender lo que no creen, es decir, lo mismo que la derecha convergente, al fin y al cabo, aunque lo nieguen en público. 
   El aterrizaje orgánico del PSOE tendría la virtud de revulsivo entre los votantes que desde hace tiempo han abandonado al PSC (no olvidemos que el PSOE ha ganado siempre las elecciones generales, salvo la última vez por el caos del zapaterato; y que cuando ha ocultado al PSOE las ha perdido todas), además de que Ciutadans crecería, pero, no a costa del voto socialista, entre otros, como sucede ahora, por el abandono del PSC. 
   Además, muchos votantes que no siendo entusiastas de los socialista por sus políticas, ante la desaparición de hecho de la izquierda catalana, apuntada al desvarío patriotero de la derecha, se verían inclinados a votarles como mal menor, visto que los iniciativos se han convertido en la cuarta pata de la mesa nacionalista, ayudando a Artur Mas a ocultar su desastrosa gestión, y afán privatizadora, además de la corrupción que rodea a su partido, CDC, en lugar de preocuparles EXCLUSIVAMENTE, como formación que se dice de izquierdas, de la lucha políticas en defensa de las capas populares, hoy ya excluidas de la sociedad, y va a peor, organizándolas para combatir las privatizaciones. En lugar de empujar el carro de la peor derecha posible, en Cataluña.
  De inmediato, los nacionalistas del PSC volverían a la que moralmente es su casa –de hecho algunos ya volvieron a la mínima oferta de cargo–, sin que se pudiera descartar la permanencia de alguno "dormido", a la espera de tiempos mejores para su causa. Pero eso sucede en todas partes.  Y volverían a la “casa gran” del nacionalismo con un triunfo y una derrota: El triunfo es el de haber logrado que el PSC durante más de 30 años no consiguiera levantar cabeza, favoreciendo que la derecha con un escaso 25 % de los votos catalanes como máximo, gobernara Cataluña (hoy incluso con menos). Lo que sin duda se les serán  reconocidos los servicios prestados por por los prebostes de esa casa gran. Y la derrota porque a partir de la clarificación ideológica, ya despojados de la rémora que los encorsetaba,  los socialistas catalanes, sin el desvarío patriotero reaccionaro de la derecha, podrían al cabo de un tiempo ser de verdad la alternativa a CiU y sus acólitos, y no mera sustitución. 
  Si Rubalcaba –o sus sustituto– estudiara la situación con un análisis frío del pasado; y lo hiciera con vistas al futuro, aparte de reconsiderar las políticas del PSOE hasta el presente, tanto de González, como de Zapatero, claramente favorables al neoliberalismo, debería considerar un fracaso las relaciones atípicas con un PSC dirigido por los adversarios, y recomponer los errores. Y sólo se pueden recomponer atacando el mal, si es preciso con el bisturí. No con aspirinas para calmar el momentáneo dolor de cabeza, jaqueca que saben los socialistas, también Navarro, volverá una y otra vez.

Ubaldo Plaza





martes, 23 de julio de 2013

LAS ESTRUCTURAS DE DEFENSA DEL RÉGIMEN


Desde los primeros momentos del golpe de Estado franquista –por no remontarnos a su preparación–, los golpistas trataron de comprometer a mucha gente en acciones, que en una situación de normalidad sin la presión de los sediciosos jamás hubieran participado. La implicación alcanzó a actos menores y a los mayores y repudiables crímenes. Era la manera que los golpistas tenían de comprometer en actos criminales a mucha gente, y  de que los que participaran en semejantes complicidades con los que habían traicionado la legalidad, no tuvieran vuelta a tras. E hicieran todo lo posible porque sus fechorías quedaran saldadas con el triunfo del golpe fascista, como garantía de que jamás serían puestos ante los tribunales para responder de sus acciones. Es una táctica perversa, pero efectiva para los que dieron el paso de romper la legalidad democrática.

   Tras la victoria  franquista  se forjó una especie de connivencia, que algunos autores han llamado “franquismo sociológico”. El mismo se extendió al comportamiento de los defensores de la dictadura, con toda suerte de atropellos, que hacía que la impunidad de sus acciones estuviera garantizada, por el mero hecho de ser adicto al régimen  dictatorial. Y semejante actitud se extendería, no sólo a las acciones de tipo político, como era obvio, sino a todo acto delictivo.

   Si se era del régimen se tenía la absoluta seguridad de que no tendría que rendir cuentas de sus actos... salvo que lesionaran los intereses de otros franquistas más poderosos y mejor situados en el poder. Y esto iba desde el mero sereno o simple guardia municipal, policía o guardia civil, hasta un alto cargo de la administración franquista. Las Instituciones franquistas garantizaban en un acuerdo no escrito, la impunidad de los defensores de la dictadura. 

   “El franquismo sociológico” caló de tal manera en todo el cuerpo social, que sigue intacto: lo único que cambió al llegar lo que se llamó transición –aquella puesta en escena y lavado de cara a la dictadura para adaptarla a los tiempos, para que el verdadero poder siguiera en las mismas manos– fue su diversidad: la extensión a otros sectores que se convirtieron también en parte del nuevo régimen, recién lavado y peinado y alisadas sus arrugas, cicatrizadas las heridas provocadas; mas sin haberlas cauterizado. Por lo tanto seguirían pudriendo el cuerpo social muchos años después, con las  purulencias de toda la herencia del franquismo, que seguiría funcionando para la defensa del régimen. Que en cuanto a los poderes reales seguiría siendo el mismo, como muy bien se puede comprobar  por la impunidad de los poderosos, que son defendidos a capa y espada de cualquier contingencia, por los medios que sean. Los mecanismos puestos por la dictadura para defender a los que sostienen el régimen, siguen intactos. 

   El régimen, tras la llamada transición, sabía que ya no sería monolítico y que habrían nuevos actores en la escena. Que fueron incorporados también como “régimen”, por contradictorio que pudiera parecer a primera vista. Se había abierto el abanico a otros personajes, ahora necesarios para el sostenimiento del régimen, aparentemente distinto. A actores de pensamiento variado, pensamiento político, en sentido superficial, pero con idénticos intereses. 
  
   La diversidad y extensión de la impunidad, ahora era necesario que alcanzara a muchos otros personajes. Los mismos que si bien en los primertos momentos pudieron considerar, de cara a la galería, negativo el estado de impunidad, en seguida se darían cuenta de las ventajas que les reportaba, que hicieran lo que hicieran, no pasara nada. De que los instrumentos de protención del régimen franquistas seguían protegiendo a los actores nuevos, al nuevo régimen, que seguiría defendiendo los mismos intereses, nombre a nombre, casta a casta, familia a familia, de siempre.
  
   De otra manera no es posible entender que los continuos casos de corrupción a lo lago de los años, vayan quedando impunes en la práctica. Y todo parezca que sea propio del rutinario paisaje con el que se convive sin el mayor problema moral. Los actores de semejantes “irregularidades” están tan seguros "de que no les pasará nada", que han perdido todo respeto al ciudadano, y a sí mismos. Entre otras cosa porque éste mismo ciudadano, educado en el franquismo primero, y en el individualismo interesado de la casta política mayoritaria, de los dos principales partidos del régimen, da por hecho de que todo lo que va saliendo, imputaciones incluidas, es un paripé, que al final, aunque sean condenados, quedará en nada. Que tras la “condena de telediario” del que se quejan sus cómplices o allegados, con indisimulado enfado chulesco de dolidos intocables, salen de la cárcel, si es que llegan a entrar, tras escasos días de encierro, y todo queda ad calendas grecas. O se alarga tanto el proceso que toda ejemplaridad queda inservible. ¿Alguien se acuerda del Caso Pretoria? 

  “El franquismo sociológico” es el que permite a Rajoy hoy, como ayer a González, a Pujol o a Artur Mas,–o a Jaume Matas como acabamos de ver–, y a tantos que por estar en escalones más bajos no son tan notorios,  que todo cuanto pasa a su alrededor les resbale. Se aferran, como en la dictadura, a su estructura de poder para no asumir sus responsabilidades políticas.  Y continúan en el cargo como si nada, hasta que lo tribunales decidan, cuando llegue. Que, como sabemos, se puede eternizar por la complejidad de los casos, los trucos de recursos leguleyos, que saben les favorece, sin olvidar la falta de medios de los juzgados. 
  No sería así si los inculpados esperaran la resolución de sus casos en  la cárcel. Y, sobre todo, si sus bienes quedaran bloqueados por la justicia, a la espera de que, una vez resuelto todo, si son declarados culpables, respondan  con sus patrimonios al daño hecho a la sociedad. Pero nada de eso sucede. Y saben que en el peor de los casos saldrán al cabo de poco tiempo con una fabulosa fortuna. Y podrán convertirse en asesores de cualquier gran empresa, que quizá no sea ajena a los motivos de su procesamiento. ¿Les suena lo de asesores?

   En una sociedad sana eso sería imposible. Un responsable político es responsable políticamente de lo que él hace y de lo que hacen sus subordinados. Sea por haberlos elegidos mal, haberse equivocado, o haber sido traicionado en su confianza por ellos; sea por haber tolerado ciertos comportamientos, o no haber vigilado sus movimientos. 

  Con todo el desastre de corrupción que llevamos, ininterrumpidamente, heredado por la dictadura –que en sí misma una dictadura es la mayor corrupción posible por el mero hecho de serlo– lo patológico es que no estén cumpliendo condena decenas de respondables políticos, empresarios corruptores necesarios para que la corrupción se mantenga, por el sistemas heredero del franquismo sociológico, que sigue defendiendo a los que sostiene el régimen, lo mismo hoy que antaño. Y semejante conformidad y convencimiento ha alcanzado al cuerpo social, que sabe que “los grandes nunca pagan sus delitos”. Y que cuando acaban condenados porque  los procedimientos no han podido ser trucados, en última instancia aparece la mano ya defintiva del poder político, para exonerarlos de cumplir la pena impuesta por los tribunales. 
   Mientras el franquismo sociológico no sea depurado definitivamente, acabadas sus complicidades corporativas de políticos, más connivencias con el verdadero poder, la banca, no podrá decirse que en España hay un verdadero Estado de Derecho, eficaz. A pesar de que haya un número determinado de jueces que se empeñen en hacer justicia, pese a todos los obstáculos que puedan encontrar; además de la frustración que pueda conllevar comprobar que su trabajo, a veces titánico, queda en nada. Sólo sera teoría. El ciudadano no percibe, la ejemplaridad de la justicia en los  delincuentes de cuello blanco del régimen. Todo lo contrario. Y cae en la trampa de la corrupción de los grandes, y, como se decían antaño cuando alguien era cogido en una pequeña estafa, respondía a modo de disculpa: “más roban ellos”. Con esa frase quedaba todo claro y justificado.

   Se hace referecia muchas veces al tan recurrente “con IVA o sin IVA”, del que dicen somos los españoles proclives al pequeño fraude. Pero eso no tendría lugar si los que de verdad deben dar ejemplo lo dieran. Y en caso contrario fueran castigados de forma ejemplar. Con ejemplos de cultura democrática, honesta de la administración, todo ciudadano condenaría una acción reprobable de sus convecinos; sería consciente de que lo estafado lo ha sido a todos. Hoy eso es imposible cuando ve el río de dinero que vuela hacia los poderosos desvergonzados, al tiempo que al más débil lo expolian de mil maneras, sin que a los responsables políticos de los gobiernos se les alteren los pelos de las cejas, mintiendo con el mayor descaro, tratando a los ciudadanos como menores de edad, dispuestos a tragar las mentiras que les digan en todo momento y en todo tiempo. La impunidad de la que se consideran disfrutan, les impide un mínimo de rubor.

   Mientras el franquismo sociológico y las estructuras de defensa de los notables del régimen no sea eliminadas de raíz, seguiremos con procesos interminables. Y los políticos apalancados en sus cargos sin la menor ética, negando con el mayor descaro la evidencia, dispuestos a resitir, como hace hoy el presidente del gobierno y su partido, a los que importan más sus cargos y el poder, que el daño que están haciendo. Y con la tomadura de pelo de decir que no dimiten “por responsabilidad”. 

Ubaldo Plaza



domingo, 21 de julio de 2013

EL RAPTO DE EUROPA



 Que Europa está raptada desde hace mucho años, por un maligno Monstruo, con la cabeza de la Medusa-Merkel y los téntáculos destructores, devastadores, mortales de continentes enteros, llamado Troika, es algo que ya  pocos niegan. Aunque para lograr el Rapto y la seducción, no se transformaron, como Zeus, en un bello y hermoso toro blanco. Sino que tan malignos  raptores se pusieron el traje seductor de demócratas, y hasta de seres civilizados, que tanto valoraba la seducida Europa, ahora despojada de todos sus encantos. Traje del que pronto se desprendió el Monstruo y sus "hierofantes". Y apareció con su verdadera faz monstruosa dispuesta a convertir en estatuas de piedra a todo el que osara mirarla y desafiarla. 
  Ahora pagamos con miserias, hambres, privaciones e imposiciones del Monstruo-Merkel depredador del Olimpo de las finanzas, de lo que no es más que el crimen organizado llamado capitalismo, nuestra candidez, por seguir a la grupa del que nos raptó y destruirá, si no ponemos remedio a su sanguinaria acción cortándole sus letales colmillos.
   Y si bien es cierto que el Monstruo liquidador y esclavista, contó y cuenta con la complicidad de nuestros próceres –o que creímos que lo eran, y no meros mercaderes, cuando aquel se quitó el disfraz,  los supuestos negociadores  patrios de los pueblos de Europa, no fueron, no han sido capaces de dar marcha atrás, salir del euro –en realidad es el marco al servicio de la economía alemana y de los bancos alemanes con otro nombre–, o modificar la función del mismo, para poder manejar nuestra soberanía financiera. 

   Los que quedaron encantados como catetos ante todo cuanto les enseñaron de maravillas de la gran ciudad, llamada UE, y su futuro prometedor, en lugar de atender las advertencias de las muchas Casandras-economistas que  advertían de que el Banco Europeo era una  sucursal del Bundesbank. Y que por lo tanto seríamos sus esclavos, hicieron oídos sordos. Y los aqueos con su caballo de Troya del liberalismo salvaje, fabricante de hambrunas en continentes enteros, están destruyendo lo más preciado que tenía Europa: sus avances sociales. Y en cuyo empeño en destruirlos llevaba años soñando el Monstruo. Hoy es un hecho de que el Rapto conduce a su liquidación y muerte. Si  los pueblos no deciden que  no quieren ser esclavos de la Medusa-Merkel, organizando la defensa, que constantemente nos muestras sus ensangrentados ojos y sus cabellos de sierpes; y nos va convirtiendo uno a uno en estatuas de piedra, que hace que los gobiernos pierdan la movilidad y la voluntad de acabar  su dependencia del Monstruo, de ella.
   La salida del euro, o la modificación de sus función para que sirva a los pueblos de Europa, no a las oligarquías depredadoras,  exterminadoras, es un paso importante, imprescindible, que hay que dar. 
  Lo que, si se empezara a hacer de forma controlada, o por algún país importante demográficamente –Francia, Italia o España–, al que se le unieran otros que aún tuviera  gobiernos dignos –hipótesis lejana en España–, no dependiente o sumiso, permitiría remontar la situación. Con sacrificios, por el desmadre financiero y el expolio habido estos últimos 30 años de salvaje capitalismo por los poderosos. Aunque infinitamente menor sacrificio  que si continuamos a las órdenes del Monstruo y la Medusa-Merkel, pagando la deuda indebida, como hacemos ahora, de los bancos privados españoles, a los bancos privados alemanes. Y además, tendríamos la certeza de que no acabaríamos como esclavos de la Troika, cosa que hoy es evidente que acabaremos siéndolo para unos cuantos, que ya consideran a los países del sur de la Europa raptada, protectorados suyos, con virreyes autóctonos a su servicio.
   Pero hay demasiados burócratas que viven –y muy bien– del Rapto de Europa. Por eso el fin será traumático. Repito, si los pueblos europeos no dicen basta al suicidio al que nos lleva el Monstruo-Troika y sus servidores, navegando por sus aguas del liberalismo expoliador, estrellándonos contra los acantilados de   Caribdis y Escila,  la liquidación de los derechos conquistados en cien años. Naturalmente aplicado el remolino marino que  nos estrellará, por los gobiernos locales obedientes y serviles al Monstruo-Troika, que aplica la Medusa-Merkel con el sadismo que la caracteriza.  
  Las continuas mentiras que nos dicen de que saldremos de la crisis, no se aguantan. Todo es falso para ir tirando, y seguir engullendo una a una partes de la distraída Europa, mientras la situación empeora para ella que sigue anonada y sin rebelarse al Rapto. 
   Y no tiene solución, todo es mentira, porque es un problema de fin de ciclo. El sistema capitalista no tiene ya salida. Porque todo tiene un principio y un fin. Y el cuerpo social que sostenía el capitalismo ha llegado al final. Pero el Monstruo de la Troika, los poderosos quieren mantenerla a costa de la esclavitud de los pueblos, empobreciéndolos cada vez más, con el señuelo de que "estamos a punto de ver la luz del túnel". O con fantasiosos "brotes verdes". Todo para alargar la agonía de la raptada Europa.   Y harán todo tipo de barbaridades, mayores aún de las que  están haciendo para lograrlo. 
   Que nadie se llame a engaño: cualquier supuesta mejora, no será más que un espejismo, que la realidad empeorará. Lo grave es que el sistema esclavista que fragua el Mostruo, puede durar muchos años...o menos. Dependerá de que los pueblos sean conscientre de que no habrá mejoras sustanciales. Todo lo contrario, irá a peor si el Monstruo ve que no hay la respuesta que merecen sus deseos criminales, genocidas, de esclavizar al continente entero. Porque iremos cayendo en la esclavitud país a país, mujer a mujer, hombre a hombre. Y nuestros hijos no recordarán que Europa un día fue una zona de cierta libertad. De la Ilustración que nos sacó del idiotismo en que nos sumió la superstición de la Iglesia durante más de un milenio. Todo lo contrario. Y además, con la complicidad de los gobiernos al servicio de los caprichos del Monstruo. 

   Hay que tomar conciencia de que la única salida es cambiar las formas productivas. La devolución de los medios de producción, y su pase de manos privadas, del Monstruo Financiero a manos públicas, producción que hoy enriquece a unos cuantos –a cada vez menos– y empobrece al resto de la población. 
  Los avances técnicos han de servir para mejorar las condiciones de vida de la Humanidad. Hoy es posible producir en una hora de trabajo, lo que necesitaba 50 o más hace medio siglo. Pero esos avances creados por los seres humanos laboriosos y científicos están secuestrados por los poderosos. Y sólo han ido a favorecer a los depredadores del salvajismo del Monstruo capitalista. Hay que distribuir el trabajo entre todos, no enviar al paro y a la miseria a millones de trabajadores. Los avances científicos se han de socializar para que sirvan a la mayoría, no a unos cuantos desalmados. 
  Es una salvajada que retrata muy bien lo que es el sistema capitalista salvaje de hoy, que se aumente la edad de jubilación, mientras más de la mitad de los jóvenes están en paro. Es un sistema enfermo, genocida, dirigido por matarifes sin escrúpulos. 

Ubaldo Plaza

miércoles, 17 de julio de 2013

CADENAS MÁS CORTAS, LÁTIGOS MÁS LARGOS: TANATORIOS


  Los dueños de España, los que de verdad mandan, el Poder con mayúscula, se han reunido con el presidente del gobierno, al que según dice su prensa,  “han dado todo sus apoyo”.  Y lo hacen pocas horas después del escándalo, ya en sesión continua, de los cada vez más frecuentes casos de corrupción sobre la presunta financiación del partido del gobierno –es un decir– y el recibo, según la documentación aportada por su exgerente y extesorero, de sobresueldos en negro.  
   Le han dado todo sus apoyo a su servidor como no podía ser de otra manera. Toda vez que el presidente del gobierno les ha regalado una esclavista Contrareforma Laboral, que hace retrocede en derechos conquistados durante más de un siglo, a los los trabajadores y a la mayor parte  de la población, la más apaleada por el régimen timocrático que padecemos, poco menos que al siglo XIX.
   Pero “nuestros” muy condescendientes con su servidor, el gran empresariado –no olvidemos este detalle, que no es todo el empresariado, ni el que crea mayor empleo y por lo tanto riqueza–, pero sí es el que mueve el cotarro del Poder, no está contento.  Esa élite de millonarios no sólo ha dado su apoyo a Rajoy  sin que les importe al parecer las formas antidemocráticas –al menos formales según sus códigos tramposos de falsa democracia– utilizadas, secuestrando de hecho la función del Congreso, por una mala concepción de lo que representa la mayoría absoluta, que en realidad lo es por una ley electoral –una más– antidemocrática.
   Pero según se ha publicado, algunos de los más destacados banqueros ha pedido a su sumiso, malherido y acorralado presidente, “que profundice más en la reformas”. Eufemismo utilizado por los poderes para enmascarar mejor sus intenciones; y decir que todavía los españoles que no sean de los poderosos, no están en el lugar que ellos, al parecer, aspiran a que estén.

   Con la Contrareforma Laboral, Rajoy –en realidad de esos empresarios-banqueros– les ha dado todo lo que querían. Pero parecen insaciables. Ahora los trabajadores están a expensas de sus deseos y caprichos, como lo estaban los esclavos en las plantaciones, cuando el amo estaba de mal humor. 
   Aunque no se vean–de momento– las cadenas ya están sujetas a los tobillos de millones de trabajadores, actuales y futuros. Ahora el látigo que esgrimen, que aunque tampoco se vea, está muy presente en forma de represión y amenazas, a veces veladas, aveces descaradas cuando protestan los fustigados. Ahora lo que se suponer deben pedir, es que las cadenas sean más cortas y los látigos más largos. Cortas las cadenas para que no puedan alejarse demasiado de la máquina y se distraigan en pensar. Y el látigo más largo, para poder fustigarlos desde mayor distancia, para que sus delicadas narices no perciban los olores del esclavo. Que la miseria provoca desaliño y malos efluvios.
    Y si a esto añadimos el expolio sanitario que se está llevando a cabo, que enriquecerá a algunos ilustres personajes relacionados con el poder político por delegación, sólo cabrá certificar cómo los trabajadores pasan directamente de producir las plusvalías que hacen posible la vida regalada de unos pocos, directamente al tanatorio. 
   Con lo que que la sanidad pública será innecesaria, y por ende baratísima. Sobre todo porque los hospitales pagados por todos durante décadas y sustraidos, serán de unos pocos, que sufragarán con el esfuerzo de los esclavos, pero que usarán los privilegiados. 
    Así que es normal que “el gran empresariado”, apoye a quien ha hecho tan bien el trabajo encomendado. Nada nuevo. esperemos que como la historia enseña, llegue el momento en que los esclavos que son la inmensísima mayoría, se den cuenta de esta obviedad, y digan ¡Basta!.

Ubaldo Plaza