domingo, 12 de agosto de 2012

PREMEDITADO INTENTO DE EVITAR EL CAMBIO SOCIAL

Los economistas, los  que no son mercenarios de los saqueadores, ya hace tiempo que lo vienen diciendo: "por este camino no salimos de la recesión, hay que ir en sentido contrario, aumentar los salarios, aumentar el gasto público, para que la economía–capitalista, no se olvide–recupere brío". Y entre ellos los hay que defienden el sistema, porque no alcanzan a ver otro, ni a entender los cambiantes ciclos de la historia. Pero aun así, piensan que todo va por caminos equivocados, que debieran dar un giro a su estrategia.

Pero no lo hacen; y no porque lo ignoren, porque los servidores de los grandes financieros que ocupan el poder real en todas las instituciones, los gobernantes, son malvados, pero no idiotas; lo que sucede es que el plan trazado por los que dominan el mundo es ir liquidando las conquistas de los ciudadanos durante los últimos cien años, llevarlos a la miseria, convertirlos en esclavos con salarios de "mantenimiento" mínimo, y tener todo el campo allanado para otros cien años si les es posible,  de salvaje explotación; porque el capitalismo ya ha acabado su ciclo de crecimiento y hay que modificar las estructuras hacia otro sistema diferente, como fue con el paso del feudalismo al entonces revolucionario capitalismo. Y el cambio es ineludible, o se va hacia la barbarie por la vía de la destrucción de la Humanidad.


Entonces, la aristocracia se resistió al cambio, ocasionando muchas luchas sociales y sufrimiento a la población que fueron estériles porque el cambio fue inevitable; hoy sucede lo mismo: el selvático capitalismo del capital monopolista especulativo, más que productivo, quiere perpetuarse todo lo posible, aunque sabe que no podrá hacerlo eternamente porque su ciclo ha acabado. Son leyes que no pueden ignorarse, aunque por la propia esencia inhumana del sistema, el capitalismo  lo intenta a la desesperada con todos los medios persuasivos y represivos, de los que dispone, que son todos. Sería de ingenuos pensar que fueran capaces de comprender que han de ir modificándolo, poco a poco, como lo han hecho en ocasiones de forma parcial, para seguir explotando, cambiar algo para que todo continuara lo mismo; porque ahora ya no hay más posibilidad a largo plazo que el cambio de sistema, porque el actual está agotado. Porque una sociedad es el vivo reflejo de sus formas de producción.


Y piensan que si van en dirección de ir acogotando a la población por medio de su postración y la miseria como se está haciendo ahora; liquidando todas las conquistas sociales, mantendrán a las poblaciones controladas. Pero el resultado será su final. Naturalmente en ese tránsito el sufrimiento de las personas será muy grande, además de que la represión la irán acrecentando cada día más, porque cada día habrá más protestas por la pura supervivencia de las personas agredidas.


Porque las protestas se irán generalizando. Y poco a poco irán convergiendo por la propia naturaleza de la represión que provoca el poder,  que cada vez actúa más a la desesperada como ya hemos podido ver en algunas de las actuaciones de los ministros o "consellers" de Interior,  hasta que inevitablemente se derrumbe la sociedad que ya está caduca. Y que se mantiene por los férreos controles que durante mucho tiempo ha tejido el poder a todos los niveles: policial, judicial, parlamentario, "mediático", religioso, educativo. Y hasta en aquellas cuestiones que aparentemente son inocentes, pero que sin duda llevan una carga ideológica de defensa de un sistema injusto e insolidario. No olvidemos que la antigua esclavitud, no ha hecho más que modificarse para que no lo parezca, pero no se ha liquidado ni mucho menos. Incluso nos han hecho creer que vivíamos en democracia, cuando eso es imposible en un sistema como el capitalismo.


Pero los acontecimientos no suceden de forma uniforme en todas partes; los ciclos históricos son muy complejos.  Habrá situaciones de retrocesos y avances que durarán mucho tiempo, y días u horas que quemará etapas de décadas; habrá lugares donde se vencerán las agresiones del poder por medio de una unidad de la población más eficaz que en otras. Y, como en toda revolución social se conquistarán parcelas de poder, que empezarán a mostrar el camino hacia el final del sistema. Y también algunas veces esas parcelas volverán a manos de los represores, hasta que la propia dinámica de los acontecimientos, la reconquiste. 


Pero la revolución social, que no necesariamente ha de ser violenta de forma generalizada, salvo que los represores de los gobiernos, los hagan necesario e inevitable–toda revolución violenta se ha producido siempre por la agresión desmesurada y desesperada de los poderes–, acaben por tomar el poder, esta vez sí, democrático,  porque será el de la inmensa mayoría, contra esa minoría explotadora; y empiece otro ciclo social sin la salvaje explotación que ha caracterizado el capitalismo, y todas las etapas humanas desde que ésta existe, salvo quizá en los primeros pasos de la Humanidad.


U. Plaza


miércoles, 8 de agosto de 2012

SÁNCHEZ GORDILLO, LA ACCIÓN SOLIDARIA Y LOS TERTULIANOS DE CÁMARA

La recua de tertulianos, opinadores y expertos en todo, que continuamente nos vienen adoctrinando para defender las posiciones del gobierno de turno, más atentos a la voz de sus amos que al sentido común y a la realidad en la que se vive, han salido como una exhalación tratando de ladrones a los trabajadores que, en una acción solidaria y simbólica, han cogido comida de primera necesidad, para entregársela a las organizaciones que tratan de paliar la situación de hambre que ya se está dando en España, en esta supuesta democracia.

La prensa de derechas –toda la prensa en España es de derechas–, incluida la que va de progre, que no hace falta mencionar su nombre, pero que defiende los mismos intereses de la oligarquía que el resto, salvo con el matiz del leguaje, dignificado por alguna pluma ilustre que justifica esa falsa aureola  progresista, se ha despachado esta mañana llamando ROBO a la acción de los trabajadores.

Y hay que decir que podríamos estar de acuerdo. Sin ninguna duda. Podríamos... salvo que perdamos de vista lo principal: Si en España, utilizando el supuesto Estado de derecho en el que dicen que vivimos; y desde hace ya varios años, los responsables de los bancos que han hundido la economía, y que, dígase lo que se diga, han estafado a cientos de miles de españoles su dinero y su tranquilidad,  y han llevado a la ruina al país, estuvieran en la cárcel; si lo políticos que gobiernan o han gobernado con mentiras, y se han hecho cómplices de esos estafadores, en lugar de estar al lado de los ciudadanos, estuvieran junto a los anteriores en la cárcel; si los delincuentes que han defraudado a Hacienda, en lugar de ser amnistiados por el gobierno estuvieran en la cárcel; si los que tienen dinero en los paraísos fiscales fueron perseguidos y fueran a la cárcel; si cuando un ciudadano, sea político o no, pero sobre todo si lo es,  porque tiene en sus manos los recursos públicos, mete la mano donde no debe, fuera de inmediato destituido, y cuando fuera declarado culpable, en lugar de amnistiarlos el gobierno, fueran a cumplir su condena a la cárcel. 

Entonces sí que habría que considerar que la acción de Sánchez Gordillo y sus compañeros sería un robo que habría que condenar. Porque todo lo anterior demostraría que hay leyes que se respetan y se hacen cumplir por todos sin mirar la alcurnia  y sin tener en cuenta la posición que tiene el que delinque. Y quien roba, sea lo que sea, pero más el que más roba, lo paga. 

Entonces habría que decir que la acción que han llevado a cabo Sánchez Gordillo y sus compañeros habría sido un capricho de kaleborroka,  como algún indigno e inmoral persebrista de cámara ha dicho.  Porque semejante acción carecería de sentido, porque sería el gobierno, las instituciones democráticas quienes se encargarían de que nadie pasara hambre, por la estafa de unos cuantos, que estarían ya pagando su delito. 

Pero llamar ladrones a unos trabajadores que tienen un alto  grado de conciencia social, solidarios con sus semejante, para hacer lo que debiera hacer el gobierno, porque fallan las leyes –o están hechas con finalidad de embudo–,  sí que es una canallada. Mientras, los responsables del saqueo financiero, y el saqueo de la Sanidad y de la Enseñanza por parte de los gobiernos,  siguen burlándose de todos, sabiéndose protegidos, como siempre como príncipes medievales. 

Lo que han hecho Sánchez Gordillo, como representante del pueblo, como diputado andaluz, que no se dedica a calentar el escaño, como casi única función de los políticos que son elegidos con los votos de los trabajadores, que se sienten encantados con su cargo, y que se olvidan con tanta facilidad de cuáles son sus verdadera funciones en la lucha de clases –que algunos han olvidado que existe y que se muestra con mayor crudeza si cabe–, es algo que por desgracia se irá generalizando. Y seguramente con menos difusión mediática, pero de forma cotidiana, si sigue el saqueo del gobierno y sus sumisión a la banca alemana y a los poderes económicos incontrolados, como ya nos anuncian reiteradamente, para que ésta recupere el dinero que no supo invertir, en connivencia  con sus colegas banqueros españoles. 

Porque se está llevando a miles de padres de familias al extremo de la desesperación. Y cuando una madre o un padre no tienen qué dar de comer a sus hijos, no hay leyes por muy represivas que las hagan los lacayos de los financieros, que los frene. No  habrá diques que los frene. Porque lo que sucede ahora, no es más que el principio de lo que vendrá, si se sigue defendiendo  políticas de expolio gansteril, y se lleva al pueblo al hambre y a la desesperación, como está sucediendo. Y más cuando, como en este caso, carece de sentido una crisis, que no es sino una enorme estafa, de la que el 99% son víctimas. Y cuando los gobiernos han dejado de ser de los ciudadanos, si alguna vez lo fueron,  para ser de los banqueros.

U. Plaza


sábado, 4 de agosto de 2012

¿A QUÉ ESPAÑOLES SE REFIERE MARIANO?

El virrey en España  del IV Reich, de las oligarquías española y  de la señora Merkel, Mariano Rajoy, ha dicho, sin que se le despeine la canosa barba, que todas los hachazos que ha asestado a los españoles en los escaso meses que lleva en el cargo, son pensando en los  propios españoles. Es discurso de la derecha, más que sabido: se arrogan la representación de todos, siendo una minoría.

Lo que le ha faltado decir al servidor de los banqueros, de los intereses de Alemania, y del resto del capital financiero, es  a qué españoles se refiere. 

¿Estará hablando Mariano de los defraudadores  a los que acaba de regalarles una amnistía, incluso habiendo dinero posiblemente procedente de lo más negro del tráfico de drogas o la prostitución?  

¿O, quizá a los estafadores de los bancos, a Bankia u otros por el estilo que se han jubilado o retirado con escandalosos premios millonarios por haber arruinado al sector bancario?  

¿O a los empresarios esclavista a los que ha regalado un hermoso látigo y unos grilletes para los tobillos de los trabajadores en forma de una Contra Reforma Laboral, que ha acelerado los ERES, sumiendo a los trabajadores en la mayor indefensión desde los años dorados para ellos de la dictadura? 

¿O se referirá Mariano a la Iglesia a la que no sólo no le ha retirado ni rebajado los privilegios medievales  que les otorgó el golpista Franco, al que sostuvo bajo palio, sino  que  saldrán ganando con la crisis?

¿Estará hablando el presidente del protectorado de Alemania, de los españoles con grandes fortunas, y que apenas pagan impuestos, por supuesto mucho menos que las rentas del trabajo?

¿O tendrá Mariano en su mente a los especuladores o esos biencolocados  para apropiarse de aquellas empresas ya privatizadas o que anuncia privatizará, como hospitales y transportes incluidos, para que unos cuantos hagan su agosto a costa de la salud y seguridad de los ciudadanos, así como la venta del patrimonio público?

¿O pensará Mariano en los españoles que desean el adoctrinamiento por parte del inefable Wert, queriendo convertir a los niños en insolidarios selváticos, en lugar de en ciudadanos, enseñándoles eso que llaman liberalismo económico–el que nos ha traído el desastre–, que no es otra cosa que crear delincuentes legales de guante blanco y negros resultados para la ciudadanía expoliada?

¿O, quizá el virrey se refiera a la casa real, que sigue sin declarar pormenorizadamente en qué se gasta el dinero de todos los españoles, lo que debería hacer el gobierno, al tiempo que debiera recortar su asignación sustanciosamente, y asignar el sueldo como jefe del Estado, no como Casa Real, donde cabe todo?

Si es a estos a los que se refiere Mariano, estamos de acuerdo, trabaja para ellos, que siendo muchos, son una ínfima minoría de privilegiados. 

Porque el resto son víctimas de sus decisiones. Los trabajadores a los que han perdido su trabajo por el egoísmo financiero; los que pierden las prestaciones sociales, porque el dinero que han pagado para sostener esos servicios, se lo ha dedicado el jefe del protectorado a a cubrir el fraude de los financieros, para asegurarse de que  los bancos del IV Reich cobren sus inversiones. Porque son estos los que están siendo rescatados, no los españoles. Como tampoco los han sido griegos, irlandeses o portugueses, los que no han contraído deuda alguna.

Entonces, ¿a quién representa Mariano y el PP, que llegaron al gobierno con mentiras y haciendo, paso a paso, todo lo que negaron que iban a hacer?

Sin duda, Mariano y su partido tienen la legalidad–la ley y la justicia no siempre van de la mano–, pero no la legitimidad, si se accede a un cargo con trampas de trilero. Como tampoco la tiene el gobierno catalán, de CiU, que utilizó parecidas artimañas, cosa lógica, porque son astillas del mismo tronco ideológico, aunque haya ingenuos que crean lo contrario.

U. Plaza



miércoles, 1 de agosto de 2012

LA "CRUZADA" DEL REY ARTUR (MAS)

En Cataluña, tras   la llamada transición, en la que pasamos de la dictadura a la partitocracia, hemos quemado varias etapas. A la primera la llamaron Autonomía. Ante la desidia e irresponsabilidad  de los distintos gobiernos de España, se promocionó un Estatuto que los catalanes no pedíamos, y que no alcanzó el 50% de la participación en aquel referéndum donde la campaña a favor del sí, fue terrorífica, y, con una realidad del 33% del censo votando a favor, que los interesados bien supieron eludir y pronto olvidar, centrándose en que ganó la mayoría. Tras otra dimisión de sus responsabilidades, por parte, en este caso de Zapatero, los nacionalistas la llamaron Nació cuando lo que se percibía con claridad, es que era una taifa. Hoy ha devenido en  cacicato.

La actitud aventurera y por tanto irresponsable del gobierno de Artur Mas, al dejar sin ayuda a los geriátricos  catalanes y  miles de personas, trabajadores, con la clara intención de echar las culpas a otros, como suele pasar con los tramposos y los malos Gobernantes–Pujol I lo tapaba todo envolviéndose en la senyera, culpando a los de fuera de sus errores o mal gobierno, como también hacía el dictador Franco con la bandera franquista–, es un acto propio de un talibanismo y por tanto carente de reflexión democrática. 

Dice el gobierno–es un decir–de la Generalitat, que no hay dinero para pagar ni la sanidad ni la asistencia a los dependientes ni a nadie,  y ha de dejar de pagar a los más necesitados, ya digo, con claras intenciones chantajistas, propio de marrulleros, no de un gobernante, que ha perdido el note, y todo el  mito secular del catalán amb seny se ha venido abajo, si es que aún se sostenía. 

Porque Mas nos dice a los catalanes que no tiene dinero, culpando de su pésima gestión al gobierno español, que sin duda la debe tener, y mucha, porque al fin y al cabo es como el suyo, un gobierno de, y para los oligarcas. Pero lo que es seguro es que las culpas suyas, suyas son. Y se las quiere endosar a otros como una cortina de humo para que la gente no se entere del mediocre gobierno que los catalanes padecemos. 

Dice que no hay dinero, pero ni por un momento se ha planteado el señor Mas rebajar los escandalosos sueldos del gobierno catalán, sustanciosamente, no esa tomadura de pelo del 5 ó el 7%; también a los diputados del Parlament, los que parece que no se han enterado de que ya hay mucha gente que come de caridad, y rebusca en los contenedores de basura.

Tampoco a Atur Mas se le ha ocurrido aumentar la recaudación entre las grandes fortunas; ni eliminar al menos cinco de las seis televisiones, que tienen, para uso y disfrute como agitación y propaganda de los partidos gubernamentales, que en Cataluña los son todos, o casi;  porque en realidad aquí no hay partidos, sino familias, que todas  tratan de preservar su parcela de poder y sus privilegios, para lo cual no dudan en apoyarse mutuamente, cuando ven que pueden peligrar, como estamos hartos de ver, a los que se llaman de izquierda, poner por encima de las supuestas clases sociales a las que dicen representar, y les han votado, su cosa patriotera y reaccionaria, que nada tiene que ver con el pensamiento democrático y de izquierdas. 

Ni se le ha ocurrido a Artur Mas olvidarse del, al menos como no urgente,  doblaje de la películas, muy caro y de escasa audiencia  y recepción por parte del público, y no digamos de los dueños de las salas.

Tampoco se les ha ocurrido dejar las embajadas, inútiles para los ciudadanos, que harían sonreír a cualquier observador, si no fuera porque nos cuestan la friolera 30 millones de euros al año, para satisfacer los delirios de la casta política que padecemos. 

Como tampoco han pensado dejar de darle dinero a la prensa afín, convirtiendo a Cataluña en un territorio sin verdaderos periódicos, ya que si alguien te da dinero, no muerdes la mano que te lo da. Con lo que el pesebre desinformativo y manipulado, está servido, poniéndose esa prensa al servicio, no de la información y la opinión pública, sino del proyecto identitario de la casta del cacicato.

Ni ha pensado Artur en desmantelar los diversos niveles de administración, que son más una oficina de colocación de los elegidos. 

Y, puestos a hablar de responsabilidades, no hay que olvidar, entre otros muchos que sería largo de enumerar,  los 200 millones de euros dados a Spanair, con la mirada puesta en la antieconómica función de una compañía aérea catalana, con la que satisfacer los mismos instintos patrioteros, que pagan los ciudadanos,  pero que satisfacen a la casta del cacicato.

Pero es que, además, toda esta fuga hacia adelante de Artur Mas en su soberanisme, no es más que una forma de llevar a la arena pública, la lucha que mantiene con el hereu y su familia, al que el papá de la misma, le tenían destinada la sucesión de su reinado, colocando, mientras tanto, porque los hijos son como son y no podemos hacer que den más de lo que pueden dar, colocaron al  provisional rey Artur (Mas). 

Una vez se ha visto en el trono el cruzado  Artur (Mas), con sus partidarios está haciendo cuanto puede para permanecer en él. Y, visto que el nene  no alcanza a calibrar sus acciones, desmelenándose con sus delirios independentistas, el cruzado  Artur se ha visto obligado a dar un paso al frente para conquistar  Jerusalén, aunque perezca todo su ejército de supuestos generales, del que, en un alarde de fanatismo religioso,  arengó días atrás a los suyos, aún a sabiendas de que no pasaría del Llobregat. Y, como diciendo: yo más, a disparates no me ganas nadie, menos este niñato. 

Quizá lo de las ITV, en el que presuntamente, está implicado el hereu,  le dé un respiro y crea que tiene mayores posibilidades de mantenerse. Y se ha lanzado al vacío del despropósito, para contentar a todo el talibanismo cercano o ajeno. Que no sería importante si no fuera porque estamos dando una imagen nefasta, que es aprovechado por los que sí sacan tajada a río revuelto, colocándonos en el terreno del hazmerreír de todos cuantos nos contemplan, y justificando eso que dicen que nadie se fía de nosotros porque cada uno tira de un lado de la manta, importándole un bledo, que el otro se muera de frío.

Y tiene muy poca gracia que para que el juego de unas ambiciones políticas afloren, se utilice como banco de pruebas a los ancianos de los geriátricos y a sus trabajadores, como ocasionales cobayas en la cruzada particular, entre la familia convergente.

U. Plaza


miércoles, 25 de julio de 2012

EL CONCIERTO "SOBERANISTA", Y LOS PARTIDOS PERIFÉRICOS DE CIU


Se comprende que los dirigentes que recogieron  los cascotes que quedaron tras el naufragio  de esa cosa disparatada llamada ERC, un partido de la burguesía catalana como CiU, le dé su apoyo a todos los disparates de los que están saqueando los servicios públicos catalanes. 

Se comprende. Como se comprende también que lo hagan los inciativos de Herrera, con la condición de que dejen de llamarse partido de izquierdas, confundiendo a los trabajadores, y reconozcan que son una parte más de la burguesía, y por lo cual  están dispuestos a apuntalar a los de CiU, como favor por ser la organización madre en la que, de una u otra forma, todos se reflejan en sus delirios identiratarios, reaccionarios y patrioteros, que tanto beneficia a la derecha catalana en estos momentos, y a la que dan su apoyo en la menor controversia que tienen con el Estado, e incluso a los desvaríos del ultra Puig, jefe del sistema represivo, olvidándose, de que si quieren hablar de izquierdas, no pueden ser al mismo tiempo parte de la burguesía saqueadora de los derechos de los trabajadores y las clases populares; la que se niega a recabar impuestos entre las grandes fortunas, como por otra parte es lógico, por ser los suyos, razón de clase. 

Lo que cabe hacer, desde una posición, no ya de izquierdas, pero sí desde sentido común y democrático, es hacer un frente entre todas las víctimas de CiU y sus compañeros de cama del PP, para echarlos del gobierno, al que accedieron con mentiras, y aplican políticas que no llevaban en su programa.  

Lo mismo se puede decir del maltrecho PSC–que a pesar de que se han hundido por los devaneos nacionalistas  del capataz Montilla, al parecer para que lo considerarán de los suyos los de pata negra del nacionalismo–, lo que no logró. Porque la burguesía sabe preservar las esencias.  Y los dirigentes de ese partido, el PSC, que muchos de ellos  suspiran por parecerse al de la burguesía de CiU,  apuestan, no por avanzar hacia la consolidación de un partido socialista, o siquiera socialdemócrata, sino hacia lo que provocó la más estrepitosa de las derrotas, la apuesta nacionalista; por otro lado previsible para todos, menos para los dirigentes del PSC, como sabemos.  


Parece que, con la intención de que no se le vaya del todo de las manos, de momento no entran en el pacto soberanista, que es la trampa de CiU a los socialistas, con lo que el partido de la ultraderecha catalán, se aseguraría por mucho tiempo el desprestigio de los socialistas, logrando que sus manejos y liquidación de lo público, no tenga oposición alguna, ni siquiera aparente. En la práctica, desarmar al PSC es el objetivo, cosa bastante fácil, por los nanitos nacionalistas que pululan dentro del partido, como Nadal o un tal Ernesto. Pero no se descarta cualquier otro vericueto aunque sea el Harakiri, para ayudar a CiU, pero que no lo parezca, con lo que la derecha pura y dura se saldrá con a suya de anular a los socialista, maniatándolos. 

Se comprenden todas estas elucubraciones de la disparatada política catalana, donde no hay partidos de izquierdas, con esta macro partitocracia que padecemos, sus todavía ciudadanos, quizá pronto sólo súbditos de la taifa de unos cuantos, ya más cercana al cacicato.

Pero lo que de ninguna manera se pude comprender desde la perspectiva de las clases populares, es que tanto UGT como CO.OO., también entren en ese juego de burgueses saqueadores. Eso no se puede entender, salvo que sea por la misma razón de  la absorción de las organizaciones sindicales, por parte de la burguesía catalana, a lo que aún me niego a aceptar, y tener la esperanza de que los sindicalistas honestos, de base, que son la inmensa mayoría, pongan las cosas en su sitio

Porque tampoco se entiende que en las manifestaciones de protesta, los sindicatos llamados mayoritarios y de clase, en lugar de salir a la calle con sus banderas rojas y sus pancartas reivindicativas, lo hagan con los mismos símbolos que utiliza la burguesía para embaucar a los incautos, que se creen el discurso nacionalistas, cuando todo el mundo que quiera enterarse, sabe que la patria de la burguesía y su expresión política, CiU, está directamente relacionada con sus cuentas corrientes. Porque la burguesía cambia de bando, si ve que es provechoso para el negocio. Ya lo hizo apoyando a Franco en el golpe contra la legalidad republicana, con todos sus medios económicos, colocándose la boina falangista, que  se la quitó, y se caló la barretina, cuando comprendió que el dictador se acababa, por razones biológicas y ya no les sería útil. Así que no se entiende que los sindicatos sean los más fervientes propagandistas de los símbolos de la derecha nacionalista catalana. Ver en una manifestación contra las políticas del gobiernos catalán hacer acopio de las mitologías de la derecha, no entra en el razonamiento de una política sindical...salvo que haya motivos no explicados, que se nos escapan a los simples mortales.

U. Plaza

sábado, 21 de julio de 2012

¡QUE SEAN ELLOS LOS !QUE SE JODAN!

Salta a la vista de que el gobierno de Rajoy, incluido su presidente, no está compuesto precisamente por lumbreras–lo que por otra parte no es ningún secreto, tanto en los gobiernos de los cacicatos de las taifas, como en el los de España–. Y si su presidente, que accedió al gobierno con mentiras, con promesas que  no tenían otro objetivo que alcanzar el la Moncloa, que de otra forma no hubiera logrado, era obvio que Rajoy  no podía rodearse él, que era el supuesto  jefe designado por Aznar, de nadie con clase, inteligencia y capacidad de gestión, para lo que se suponía era un cambio de gobierno–al menos así lo creyeron millones de ingenuos–,  para mejorar el desastre y el fraude de un Zapatero, que traicionó a las clases populares que lo habían votado, poniéndose  de rodillas ante los saqueadores de eso que llaman los mercados, que es el robo a los ciudadanos, pero a lo macro, a lo grande, y de su abanderada la inefable jefa con rebeca del IV Reich, que está aplastando a Europa, con los colaboracionistas de los gobiernos locales. 

Así que Rajoy, para no quedar más deslucido de lo que ya en sí mismo es el pobre hombre, se rodeo de personajes inferiores, de escasa valía que no le hicieran sombra, lo que no era muy difícil, de la opacidad de un Montoro, el risitas en los entierros y Cenizo Mayor de la monarquía, que nos hunde más y más cada vez que abre su boquita; de un Guindos que no da pie con bola y que sólo sirve para que los caricatos le saquen punta a sus puestas en escena de ahogos amistosos de algún compinche europeo, que se tornan en tragedia  para los españoles; una ministra de Sanidad que recurre a los brujos y a las hierbas para que se curen los enfermos, y si no se curan !QUE SE JODAN!,–los enfermos, no ella y los suyos que con nuestro dinero puede seguir con la medicina normal–; al tiempo que otra de su estirpe e inteligencia, fía todo la solución de los problemas, con el regocijo de la fundamentalista medieval  y muy rica Conferencia Episcopal Española, a una tal Virgen, sin que en ningún momento que se sepa, se haya sonrojado por semejante brillante idea, en el siglo XXI. Aunque se comprende  que con esas ideas medievales de rezos y rogativas, que la investigación no sea lo que quita el sueño a este gobierno, el que ha asestado, como a todo–menos a la Iglesia, claro–, un hachazo de muerte, lo que nos sumirá en un atraso como país, ya secular. 

Pero es que si se hace un somero repaso sobre algún otro de los restantes ministros, uno se queda atónito ante el hecho de que un antiguo tertuliano de los chafardeos de las televisiones embrutecedoras, Wert, lo hayan hecho nada menos que ¡ministro de Educación, Cultura y Deporte! El mismo que, como sus colegas, sin el menor sonrojo le da un montón de millones nuestros a los Toros, y se lo quita a otras partidas como Educación.

Uno no puede creer que tanta mediocridad junta sea fruto del azar, una casualidad. Y eso sirve tanto para los gobiernos de las taifas como para los del Gobierno central. En Cataluña, que siempre hemos tenido gobiernos malos y todos de derechas y al servicio de las clientelas, también tenemos el peor posible, para nuestra desgracia. Más se inclina uno a pensar que está todo muy meditado para arruinarnos la vida a todos los españoles, sin que les importe. 

Quizá, quien mejor ha resumido esas intenciones no confesadas, pero sí evidentes demoledoras para llevar al hambre a millones de familias, sea la muy educada señora Fabra–educada, suponemos según los cánones de la santa madre Iglesia–, diputada  del PP, con su sincero exabrupto contra las víctimas de sus medidas, los parados, y por extensión a millones de españoles: ¡QUE SE JODAN!. ha dicho la elegante diputada de la caverna.

Esperemos que las crecientes movilizaciones de los ciudadanos contra el saqueo de lo público, le amarguen de alguna manera la fiesta a estos señoritos y caciques de sueldos y prebendas de escándalo–también a los  de CiU, tan cercanos como clase en esos manejos a los del PP–, y de una vez por todas sean ellos los que tomen la cicuta y sean los QUE SE JODAN, una minoría, en lugar de que NOS JODA esa minoría a todo el pueblo como están haciendo ahora. 

U. Plaza


viernes, 6 de julio de 2012

EL LABERINTO DEL PSC, Y EL JUEGO POLÍTICO DE LA SUPUESTA IZQUIERDA CATALANA

El laberinto en el que se encuentra el PSC no es ni mucho menos nuevo; es el fruto de toda una trayectoria de una formación que se proclama de izquierdas y socialista, al tiempo que los delirios nacionalistas lo mantienen anquilosado en las mismas ruinas y putrefactas aguar por las que navega la ultraderecha de CiU y el resto de los partidos catalanes–ERC e ICV–que en la práctica están en su órbita a la hora de defender la patria inventada, uniéndose incondicionalmente a ella para defender en definitiva los suntuosos negocios de la derecha. 

Lo que parece mentira es que en tantos años no hayan aprendido, no los jefes del partido que son los responsables de ese doble juego del disimulo en el que sólo se muestra socialistas en las grandes asambleas anuales, o cuando se acercan la elecciones, con una audiencia de trabajadores, para de inmediato quitarse el traje de izquierdas y pasar  a emborracharse de delirios soberanistas y patrioteros. 

Lo  lamentable es que tras tantos fracasos y tantas muestras de que el PSC va en dirección contraria de lo que proclama, no haya habido quien se rebele y decida de una vez por todas clarificar la identidad del partido. Ya que como es sabido, una formación política no marca la diferencia en función del pomposo nombre que exhiba, sino en la política que hace, sus objetivos reales y si la práctica de cada día lo confirma.  

El componente reaccionario–nacionalista–que anida en el PSC, y en cargos de importancia, son la mejor opción que tiene la derecha catalana para impedir que ese partido que cuenta con un potencial social popular importante, no pueda arrancar y se desprenda del cáncer que lo corroe, el nacionalismo–como al resto de los partidos que así mismos se llaman de izquierda, contra todo razonamiento–. Tras el fracaso de la últimas elecciones en la que el PSC se hundió en las catalanas, pero incluso en las generales que nunca había sucedido,  era razonable una reacción de indignación contra los sepultureros que lo provocaron. Sin embargo nada de eso ha ocurrido. Todo ha quedado como estaba, e incluso peor, ya que en lugar de rectificar en sentido positivo y de izquierdas, o socialdemócrata, que es lo que dicen ser, surgen voces de lo más añejo de la formación, que piden ser más macionalistas. Con lo que se hace las delicias de la ultraderecha de CiU, que ve semejante parálisis  del principal partido de la oposición, como un regalo. En realidad, ambas formaciones cabrían en en el mismo partido, ya que la política que hace el PSC a nivel general, es hermana gemela de la  de CiU en el aspecto patriotero.

Y ahora, cuando están en la oposición, en lugar de aprovechar la travesía del desierto  que están obligados a soportar, por su entrega total a las políticas del nacionalismo del gobierno de Montilla, en lugar de ponerse a pensar en recomponer el maltrecho tinglado, en lugar de rectificar y modificar sus prácticas con una política clara de enfrentamiento al saqueo que  está llevando a cabo CiU contra la inmensa mayoría de los ciudadanos, en lugar de esto, de la mano del nacionalista Navarro, jefe de un PSC con respiración asistida, quieren echarle una mano a los saqueadores, en nombre de una incompresible solidaridad patria, que sólo beneficia a los de siempre, y desmiente por enésima vez, que el PSC sea otra cosa en esencia, que un sosia de CiU. 

Lo lamentable es que no sólo es el PSC, sino que en toda la fauna política catalana, priman más  los delirios soberanistas que los intereses de clase a los que dicen representar. No se entiende que no sean capaces de denunciar en el parlamento catalán, pero también en la calle junto a las víctimas, en la luchas que lleva a cabo la ciudadanía, muchas veces sin que se enteren, con firmeza y no con guante blanco como suelen hacer, todo el saqueo al que está siendo sometido el ciudadano por CiU y el PP. Y se ha de hacer, no para que en un juego dialéctico florentino decirle a los saqueadores gruesas palabras que después se diluyen en un amigable conversación entre amigos, limando asperezas para que no se enfaden los de CiU, y así mantener el mal entendido respeto parlamentario, como si la derecha supiera de respetos, cuando de los negocios de su clase se trata. Sino como forma de informar de ello a los ciudadanos, utilizando el acta de diputados como altavoz contra la tropelías de CiU y sus hermanos de clase del PP. Llamando a la movilización, a organizase junto a otros colectivos que lo están haciendo. Si no, la verdad es que carece se sentido que hayan diputados que sólo se dediquen al juego parlamentario, que es la trampa de la derecha, que encorseta toda discrepancia sin que tenga efectividad para los que le han votado. A lo sumo para mantener caliente el escaño. Y que las decisiones dictatoriales de  la  clase dominante, se presenten como democráticas. 

U. Plaza